La habitación era amplia con una cama muy cómoda, unas vistas preciosas y un dormitorio, y tener una cafetera/tetera y cristalería fue un gran plus.

La ubicación era sensacional, resultó ser un lugar para alojarse estupendo. La cama era super cómoda, el baño bueno y había una cafetera, una zona de estar y una mesa de trabajo en la habitación. Un baño bien equipado con una bañera. Ubicación: el hotel estaba en las inmediaciones de un castillo, del centro de la ciudad y también de un hermoso entorno. Y es que estaba a un agradable paseo de Crêperie Tivabro, comí allí un par de veces.

Las habitaciones eran enormes y lo suficientemente espaciosas, con una cama muy cómoda. Nos ha gustado el comedor donde se toma el desayuno😀

Nuestra habitación era amplia y tenía unas vistas increíbles, tal como esperábamos.

Tuve una estancia maravillosa en este hotel familiar. Mi habitación era espaciosa y tenía una vista impresionante. El desayuno fue excelente y tal como se describía. El comedor era un lugar perfecto para empezar el día.

Este hotel familiar tiene unas vistas increíbles. La suite que nos asignaron era fantástica. Está ubicado en un lugar maravilloso, muy cerca del Porte Notre-Dame. Es la mejor opción de alojamiento al visitar Fougères.

Nos recibieron con cariño, proporcionando toda la información y ayuda necesaria. La vivienda es preciosa, una oportunidad excepcional de alojarse en una casa del siglo XVIII. El baño está totalmente reformado y la cama es grande y comodísima. Las vistas de la ciudad baja son inmejorables y el desayuno es un festín con tartas caseras, crepes recién hechas, quesos y zumos naturales.

Nada a destacar.

Las camas eran súper cómodas, y en la habitación había una zona de estar, una mesa de trabajo y un hervidor eléctrico. ¡muy conveniente! 🔌

Exquisita amabilidad y disposición. Trato cercano y atento.Desayuno casero abundante y riquísimo.Vistas al castillo impresionantes.Encanto especial, te trasladas al medievo.

Nada, es perfecto.

Las habitaciones son enormes, tienen hermosas vistas y el desayuno es excelente, una buena elección de productos.

Mi esposo y yo nos alojamos en este encantador hotel durante dos noches y nos recibieron con cariño y amabilidad. La casa del siglo XVIII está bellamente decorada, combinando detalles antiguos con comodidades modernas. La habitación era espaciosa y cómoda, con una cama grande y una vista impresionante de la ciudad baja. La calefacción central y el baño reformado añadieron un toque de comodidad. Además, el desayuno fue una verdadera delicia, con una gran variedad de tartas caseras, crepes, quesos y zumos naturales. Nos sentimos como auténticos reyes.

No dudaría en recomendar este hotel.

Un lugar encantador, te hacen sentir que estás en la época de la casa, limpieza impecable, todo super acogedor destacable la amabilidad y trato personalizado y la gran sorpresa la tendrás cuando te levantes al día siguiente con el desayuno es espectacular el sitio, las vistas el esmero con el que está todo preparado. Muy recomendable.

Recomendaría este lugar.

Excelentes vistas y decoración encantadora. Desayuno delicioso y variado. Alojamiento cómodo y limpio. Una experiencia maravillosa y recomendable.

Durante nuestra estancia en esta encantadora casa de época, tuvimos una experiencia inolvidable. El hotel se encuentra en pleno centro de la ciudad, lo que nos permitió disfrutar de las maravillosas vistas del castillo y del resto del pueblo. La habitación era grande, acogedora y muy limpia, con detalles que la hacían perfecta. El desayuno casero en el comedor antiguo fue una delicia, con repostería, zumos y mermeladas artesanales. Solo encontramos un aspecto negativo, pero realmente insignificante.

Sencillamente maravilloso. La casa es confortable y tiene las mejores vistas de Fougères, con el castillo justo en frente. La habitación es cómoda y la calidad del sueño es excelente. El trato del personal es impresionante, siempre dispuesto a ayudar. El desayuno es el mejor de todo nuestro viaje, con pan, croissants, mermelada casera y crepes deliciosos. No falta ningún detalle en el baño, incluyendo champú, jabones y batas. ¡Todo es simplemente maravilloso!

Despedirme de sus encantadores dueños.